Tierra con alma

¿Tienen alma las verduras? Después del #a4manos de Benet Vicens y Maria Solivellas estamos a punto de decir que sí.

Los chefs de Bens d’Avall y Ca Na Toneta fueron capaces de transmitirnos las sensaciones que provocan las verduras de temporada, las que huelen y saben, las que nacen y crecen en la tierra de Mallorca.

Fue un #a4manos de recetas mallorquinas, de esas comidas de subsistencia que para nuestros abuelos eran ‘el pan nuestro de cada día’ y que ahora son un manjar sencillo y auténtico que grandes cocineros como Maria y Benet se esfuerzan en recuperar: sopes mallorquines, greixera d’ous, sopes d’olivar… 

El periodista Andreu Manresa nos contó historias de esos tiempos, con la sabiduría de la experiencia y la curiosidad del que mira, pregunta, aprende y transmite. Así supimos de esa mujer payesa que le hizo prometer a su marido que jamás volveria a comer sopes; aprendimos que las pencas de las acelgas se transforman en exquisitos peixets (pescaditos); y reconocimos en la foto del aula Mestre Tomeu Esteva de la Escuela de Hosteleria al maestro andritxol que murió en 2010, a los 90 años, convertido en maestro de maestros otorgando la categoría que se merece a la cocina mallorquina.

El vino 

También supo transmitirnos su amor por la tierra Bàrbara Mesquida, quien ha comenzado una nueva aventura con vinos Mesquida Mora, en Petra. Sus vinos son la suma de vides nuevas con otras que acumulan más de 30 años, cultivadas con biodinámica y tracción animal.

Probamos dos tintos: el Trispol y el Sòtil. Suelo y techo que sostienen un proyecto de vida que parece apasionante.

Ya ven las maravillas que tenemos en Mallorca. Incluso los cafés y los tés que nos ofrece Marabans con raíces en Santa Margalida.

Y junto a todos ellos, discretos y atentos a las explicaciones y a las instrucciones, los alumnos de la Escola d’Hoteleria de les Illes Balears que apuntan maneras de grandes cocineros.

Nuestros #a4manos tienen alma.