Hidden Kitchen: la película

Hidden Kitchen: la película. Suena bien, ¿verdad? Al menos, creíble. Preguntádselo al chef Íñigo Rodríguez (El Hotel Pacha, Ibiza), que tras publicar en sus redes sociales la foto que ilustra esta noticia, recibió alguna que otra llamada preguntándole si era cierto que había rodado una película. No, la verdad es que (todavía) no existe la película de los Hidden Kitchen de Chefsin, aunque ya hemos empezado a hacer nuestros pinitos en el mundo del cine. Exactamente, nos pusimos a ello el pasado domingo, gracias a Cineciutat, que nos dejó cocinar en sus salas. Allí fue donde escondimos la cocina del chef Íñigo Rodríguez en el primer Hidden Kitchen de 2018. ¡Un auténtico almuerzo de cine!

Íñigo preparó un menú de 10 pasos inspirado en películas: Tapas, Jamón, jamón, Sin reservas, Charlie y la fábrica de chocolate… y así hasta una decena de películas. Podéis ver el menú completo a la derecha y las fotos, en la galería al final del reportaje. Todas las presentaciones estuvieron cuidadas hasta el más mínimo detalle, como le gusta a Íñigo, tanto en lo que respecta al producto (local y de temporada) como a la puesta en escena, con una vajilla elegida expresamente para servir cada paso. Los vinos que maridaron el menú fueron seleccionados por Vinamica, cuidadosamente elegidos teniendo en cuenta los sabores predominantes en cada plato. Tampoco faltó el agua Evian en la mesa.

Convocamos a los comensales a las 13 horas frente a uno de los accesos a s’Escorxador de Palma. Algunos de ellos, días antes, ya habían dejado caer alguna sospecha. «Será en un cine». No iban mal encaminados. Esta vez, las pistas que enviamos a los participantes la semana previa al evento fueron bastante fáciles, lo admitimos. Pero ahí está la gracia, animar a los comensales a jugar a adivinar el lugar. De todos modos, hasta el último minuto no sabrán si han acertado o no.

¿Qué es lo primero que hacemos cuando vamos al cine? Compras nuestras entradas. Los comensales tuvieron que recoger en taquilla su entrada, que iba acompañaba de un vale por un «combo» de palomitas y bebida. Un clásico de las salas de cine. Al llegar al vestíbulo de Cineciutat, los comensales pudieron canjear su vale por una caja de palomitas y una bebida… un poco especiales.

Íñigo Rodríguez, para empezar el menú, preparó tres divertidos snacks inspirados en las clásicas palomitas que todos hemos pedido alguna vez mientras disfrutamos de una película en nuestro cine favorito. Estos primeros bocados los maridamos con una bebida que no se puede encontrar en ningún cine -¡al menos de momento! y que preparó para la ocasión Matías Iriarte, el brand ambassador de Bodegas Suau. Iriarte preparó un Noca cola, un cóctel servido en botella de refresco a base de brandy Suau, reducción de cola, jengibre y vainilla.

Cinciutat fue el lugar en el que escondimos la cocina del chef Íñigo Rodríguez en el primer Hidden Kitchen de 2018

Caja de palomitas y cóctel en mano, dirigimos a los comensales hacia la Sala 1 de Cineciutat. No, allí no estaba montado el restaurante efímero que la empresa de alquiler de material y mobiliario para eventos Jaiak Tendencias & Diseño había preparado para esta ocasión. En la Sala 1 esperaba a los comensales una proyección. Porque eso es lo que se va a hacer al cine, ¿verdad? Bueno, al menos habitualmente… 😉 La pantalla de la Sala 1 se encendió para reproducir en sesión privada Woody & Woody, un cortometraje de los mallorquines Jaume Carrió (dirección) y Laura Gost (guión) que está nominado a la categoría de Mejor Cortometraje de Animación en los premios Goya de 2018, que se entregan el sábado 3 de febrero. El cortometraje, mediante un ficticio encuentro entre un Woody Allen treintañero y un Woody Allen octogenario, pretende ser un honesto homenaje al conocidísimo cineasta de Nueva York, con diálogos llenos de ironía e ingenio y unos dibujos que parecen moverse a ritmo de jazz. Desde aquí les deseamos toda la suerte del mundo a Carrió y Gost.

Tras la proyección de Woody & Woody invitamos a los comensales a realizar un breve tour por las entrañas de Cineciutat y descubrir qué sucede «tras» la pantalla. Javier Pachón, presidente de Cineciutat, les mostró una de las salas de proyecciones del cine, donde les explicó el complejo proceso que hay detrás de la maravilla que es el séptimo arte. Aunque las tecnologías más modernas hayan reducido el trabajo del proyeccionista prácticamente a pulsar botones (ojo, hay que saber cuáles y cuándo), lo cierto es que años atrás este era un trabajo muy laborioso que requería de la máxima concentración y de una coordinación milimétrica para que el espectador, sentado unos metros abajo y ajeno al trabajo del proyeccionista, no se percatara de los cambios de cinta (hasta 5 o 6 en función del filme) y disfrutara al 100% de la película.

Los comensales pudieron disfrutar del cortometraje mallorquín Woody & Woody, nominado a los Premios Goya de 2018

Mientras Pachón explicaba a los comensales con gran pasión el trabajo que lleva a cabo Cineciutat («es mucho más que un cine»), los comensales pudieron degustar nuevos aperitivos preparados por el chef e inspirados por la película Tapas. Cineciutat nació como un proyecto ciudadano para salvar las salas del antiguo cine Renoir de Palma, cuando anunció su cierre en 2012. Se mantiene vivo hoy en día gracias a las aportaciones de sus socios y al trabajo desinteresado de muchos de ellos, entre los que se encuentran la Junta Directiva. Además de proyectar películas, Cineciutat acoge en sus salas espectáculos muy diferentes, desde conferencias a conciertos de heavy metal, pasando por conexiones en directo con festivales internacionales o eventos particulares. Como cine asociativo, Cineciutat siempre tiene las puertas a nuevos socios, que se pueden dar de alta desde aquí mismo.

Íñigo Rodríguez inspiró su menú en películas, muchas de ellas con la gastronomía como eje central

Sobre las 14 horas los comensales se sentaron en la mesa, colocada bajo la gran pantalla de la Sala 2. Antes de sentarse, los participantes tuvieron que encontrar su lugar. Habíamos preparado un sencillo seating plan que todos supieron resolver rápidamente. Simplemente, tenían que encontrar un punto en común entre ellos y los carteles de cine dispuestos frente a cada silla. Allí pudieron saludar al chef, que ya hacía algunas horas que estaba cocinando. Íñigo llegó al cine prácticamente directo de Ibiza. Su barco de Baleària partió el sábado por la noche del puerto de Ibiza y llegó entrada la madrugada del domingo al puerto de Palma. El chef y su ayudante de cocina pudieron descansar unas 4 horas en su habitación de Purohotel Palma antes de ponerse de nuevo en marcha. A las 9:30 horas ya estaban en la Sala 2 de Cineciutat acabando de adecuar la que sería su cocina para las próximas horas.

Fueron más de 2 horas y media de almuerzo en mesa, casi 4 horas en total. En todo momento, Íñigo cocinó ante los comensales y les explicó los platos uno a uno. Un menú que terminó con cafés de Marabans Coffee & Tea y unos petit fours preparados por el chef. Esta es la magia de montar un evento efímero como los Hidden Kitchen, que te permiten estar cocinando un almuerzo para 16 comensales en una sala de cine y que a las 17:45 hores esté programada una sesión de cartelera.

Gracias a Cineciutat por abrirnos las puertas de su casa y dejarnos cocinar dentro. Gracias a Jaume Carrió y Laura Gost por dejarnos proyectar Woody & Woody en sesión privada; os deseamos toda la suerte del mundo el sábado. Y gracias también a los demás colaboradores y patrocinadores de Chefs(in) que hacen posible eventos como este Hidden Kitchen: Jaiak Tendencias & Diseño, Bodegas Suau, Marabans Coffee & Tea, Evian, Vinamica, Baleària, Makro, Purohotel Palma y Deacorde Marketing.