TEMPORADA 1, EPISODIOS 1, 2, 3 & 4
Chefs(in)Club
En todo este tiempo de Chefs(in), nos hemos dado cuenta que hay personas a las que la cocina no os da miedo. Y no sólo porque seáis capaces de comer todo lo que os pongan en el plato sin rechistar demasiado, incluso con una sonrisa, sino porque os encanta meter las manos en la masa. A partir de ahí, pensamos que la mejor forma de dar respuesta a esas ansias de cocinar, además de presentarnos en vuestras casas para que nos invites a comer, era que lo hiciérais de la mano de algunos de los mejores. Así que hemos creado una sociedad gastronómica a nuestro estilo. En palabras de nuestro director (oh, maestro), “un grupo de gente cohesionada y unida por un interés común: cocinar y aprender de los que saben más. No es un restaurante donde ir a comer y que te lo den todo hecho. No es un txoco o un espacio de cocina para libre uso de los miembros. Y desde luego no es un mira, yo sé más que tú”. Más claro, agua (el vino, nos lo bebemos).
Y eso ¿en qué se concreta? La idea es que crezca hasta donde nos dé la neurona, pero, por el momento, en el Aula Chefs(in), de la mano de QUKNIA by Álvarez, un espacio en el que los miembros vienen a cocinar. Son clases para amateurs, pero para amateurs que van más allá de una tortilla francesa. Una vez al mes, estas personas se enfundarán sus chaquetillas y seguirán las órdenes de un miembro de Chefs(in), que les ofrecerá parte de su conocimiento, trucos, fórmulas, explicaciones y técnicas, mientras preparan las recetas de lo que cenarán justo después. Todo un festival de conocimientos, buen rollo y gastronomía.
La inauguración del curso vino de las manos artesanas de Miquel Calent, chef de Can Calent y Cuit. Un Trempó d’hivern, un Aguiat de pilotes amb pasta d’ensaïmada y unas Oreanes amb arrob de codony fueron sus tres platos. Su magnífica sabiduría, su sonrisa y su amor por la cocina mallorquina con la pátina de vanguardia, que le ha valido ser uno de los chefs más conocidos y reconocidos de las Baleares, fueron un brillante pistoletazo de salida para una noche de martes de octubre en la que había ganas, curiosidad y hambre de saber y de comer. Los vinos, Pin Up tinto y Pin Up blanco, de Chefs(in).
Con la primera tarde de frío de noviembre, el Aula Chefs(in) dió un salto a la creatividad sorprendente: Andrés Benítez, de Botànic, acompañado de James, su jefe de cocina, demostraron que las verduras tienen mucho que decir en gastronomía, aunque no seamos veganos o vegetarianos. Su concepto de darle a los vegetales el protagonismo que habitualmente la tienen la carne o el pescado y poner a estos en un plano de acompañamiento, es un festín de sabores y técnicas que sorprendieron a sus nuevos alumnos. Green is the new sexy, que dicen ellos. Sus dos snacks (chips de kale y sashimi de berenjenas) y tres tapas (puerro asado con garam massala, célery a la cantonesa y calabaza asada con tartar de gamba roja) fueron un recorrido por el Mediterráneo, Asia, Europa y África, en forma de especias, técnicas de cocción, presentación y corte. El maridaje lo puso Lolo Pérez, de Dismavi, una magnífica garnacha tintorera de Garagewine, y un Los Loros, Blanco de Canarias, que alzó los sabores especiados de las tapas.
El siguiente en la lista fue Tomeu Lassio y su imaginación aplicada a la cocina mallorquina. Sus manos demostraron que cocinar con ingredientes de temporada y que se pueden encontrar en (casi) cualquier despensa, puede dar resultados realmente espectaculares. Crema de coliflor con botifarró, escorball al horno con allioli a la mallorquina, contramuslo de pollo relleno al estilo Jaume I y Tosta de membrillo y sobrassada, fueron su propuesta para dar a conocer su manera de entender la cocina. Una manera que le valió la réplica de más de un alumno de todo el menú en sus comidas de Navidad (no daremos nombres, pero sí).
El último antes de que Marga Coll, la primera de las Chefs(in) salga a la palestra, fue el recién galardonado con su primera Estrella Michel, Jordi Cantó. El chef de Sa Clastra dio una lección de pesos, medidas y proporciones perfectas en cada una de sus propuestas en una cocina más allá de la propia cocina. Sus llampuga en escabeche y arroz con setas y codorniz, reafirmó la sabiduría de un joven que ha pasado de ser el segundo en Zarabanda a estar en primera línea por méritos propios.
En siguientes episodios relataremos los siguientes platos y sus sesiones de sabiduría y trucos de cocina, pero, sobre todo, aventuras, buen ambiente y un grupo de (ahora ya sí) buenos amigos que saben lo que es divertirse en una cocina. Pero eso será otro día. Hoy, sólo podemos agradecer a todos los que formáis esto, a QUKNIA by Álvarez, que se ha prestado al juego, y a los que venís a jugar con nosotros.